El río plateado y nocturno

Camino por la costa distraídamente y vemos juntos el ocaso:
Vos hermosa me dejas sin palabras y te escucho y al viento
lo siento mezclarse con algo de tu aroma inolvidable y dulce
toco tu mejilla/tibia/se aleja/lejana/extraña/reservada/suave.
Camino por el agua y no me sumerjo sino que floto y así es
como veo la luna por fin aterrizada de manto plateado en la
negruna y crispada por la brisa superficie en la cual navego
con mis pies/No me detengas ni con la brisa ni con el miedo
la sensación placentera se extiende alejado de cada deseo
en una vuelta sonora/memorial sensación de aliento fresco
al llegar a la costa lo floreal y verdusca de los camalotes de
la ñacaniná escondida y de ojos relucientes que me esperan
cuando me adentro bajo los sauces llorones para no volver.
(Sueños del Yabebirí)